El Hospital Universitario Son Llàtzer, junto con la asociación Yes With Cancer y en colaboración con la Fundación “la Caixa”, ha presentado el estudio científico “Prospectivo aleatorizado de intervención para valorar la eficacia del ejercicio físico personalizado sobre la calidad de vida y la condición física en pacientes oncológicos”, que pretende demostrar los beneficios del ejercicio físico en los pacientes con cáncer.
En dicha presentación han participado la consejera de Salud, Patricia Gómez; el gerente del Hospital Universitario Son Llàtzer; Xisco Marí; el presidente de Yes With Cancer e investigador, Gabriel Rojo, y la investigadora principal del estudio, Paula Bargay.
El objetivo principal del estudio es demostrar que los pacientes que realizan un programa de ejercicio físico personalizado tienen mayor beneficio en cuanto a calidad de vida y bienestar físico que el grupo que no lo realiza.
Según explica la investigadora principal, Paula Bargay, existen pocos estudios sobre el tratamiento con ejercicio físico de forma supervisada, y de ahí surge la idea de elaborar este estudio con pacientes oncológicos del Hospital Son Llàtzer.
El estudio comenzó en el mes de enero de 2018 y en este momento cuenta con 12 pacientes que provienen de las consultas de oncología y hematología del Hospital. Dichos pacientes deben cumplir unos criterios de inclusión y firmar un consentimiento informado.
Antes de iniciar el programa, los entrenadores realizan un test de calidad de vida a cada paciente; uno inicial, antes de que el grupo de control haya recibido el tratamiento del ejercicio físico, y un último postratamiento, en el caso de los pacientes que lo hayan llevado a cabo, así como del grupo observacional para poder observar las diferencias de ambos. Además, valoran las capacidades físicas de los pacientes, tales como la capacidad cardiorrespiratoria; fuerza y resistencia muscular; composición corporal; flexibilidad, y equilibrio.
Procedimiento
Los pacientes asisten a la Unidad de Rehabilitación Cardiaca del Hospital Son Llàtzer cada 15 días. Allí realizan su programa de ejercicio físico individualizado, que consiste en ejercicios de trabajo cardiovascular, fuerza-resistencia y flexibilidad.
Durante las sesiones aprenden la correcta ejecución de los ejercicios y posibles problemas y contraindicaciones que existan en el momento, teniendo en cuenta la situación en la que se encuentra el paciente.
Los pacientes se reúnen transcurridos quinces días con la entrenadora personal para supervisar lo que han hecho y plantear nuevos retos para los próximos días. Además, pueden comunicarse con su entrenadora a través del correo electrónico en el caso de que les surja algún problema o inconveniente.
Para poder participar en el estudio el paciente debe tener entre 40 y 70 años, padecer cualquier tipo de cáncer y haber firmado el consentimiento informado. Existen diferentes criterios de exclusión, como haber sufrido un infarto de miocardio en los últimos 6 meses, padecer insuficiencia cardíaca, tener obesidad mórbida, escala de estado funcional mayor o igual a 3, insuficiencia respiratoria, hemoglobina inferior a 8 g/dl, plaquetas inferiores a 10.000, mieloma, lesión muscular grave que impida realizar ejercicio físico o fracturas patológicas.
[Fuente: Consejería de Salud. 10/05/2018]
[Foto: Consejería de Salud]
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— Infosalut (@infosalut) 21 de maig de 2018