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El Hospital General de Palma dispone de una consulta dental específica para personas con necesidades especiales

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El Hospital General de Palma dispone de una consulta dental específica que atiende específicamente a niños y adultos con necesidades especiales, derivados de centros de salud donde no ha sido posible realizarles el tratamiento dental.

Nacho García-Moris es el responsable del gabinete dental del Hospital General de Palma desde hace cinco años.

“Atendemos pacientes con diferentes patologías como puedan ser el autismo, la parálisis cerebral, el síndrome de Down, pacientes con algún tipo de deficiencia y pacientes no colaboradores del Programa de Atención Dental Infantil (PADI)”, precisa García-Moris. Los pacientes no colaboradores, explica el dentista, son aquellos que “no pueden o no quieren abrir la boca; la exploración es muy complicada y pueden tener algunos problemas si, por ejemplo, trabajas con agua, porque no tienen el reflejo de tragar”.

La mayoría de los pacientes son atendidos a la consulta, si bien uno o dos veces al año García Mueras se desplaza a las residencias para personas con discapacidad intelectual de Son Tugores y Son Llebre para hacer una revisión dental a los usuarios.

La consulta del Hospital General ofrece servicio a las Illes Balears. En el caso de Menorca, la mayoría de pacientes pueden ser atendidos en la misma isla, pero en el caso de las Pitiüses deben desplazarse a Mallorca. Actualmente, se trabaja en la instalación de una consulta específica en Eivissa.

“Hay pacientes con algunas patologías, como por ejemplo el síndrome de Down, que son mucho más propensos a tener enfermedades periodontales, por falta de higiene y de mantenimiento, provocando con el tiempo la caída de piezas dentales” destaca. Así mismo, hay otros tipos de síndrome que tienen más tendencia a tener caries y otros casos en que su patología, como por ejemplo una parálisis cerebral, no los permite tener una higiene bucal adecuada y necesitan limpiezas bucales con frecuencia. “Todo esto se tiene que estudiar y valorarlo individualmente”, sentencia.

“Se tiene que tener paciencia y, sobre todo, tener ganas de tratar estos pacientes; si una limpieza convencional se hace normalmente en veinte o treinta minutos, un paciente con necesidades especiales requiere más tiempo, incluso, varias sesiones”, explica.

La atención a este tipos pacientes es delicada y el modus operandi es diferente según la patología y el paciente. “Intentamos que cojan confianza, tenemos que ir muy despacio”, señala. “El primer día no acostumbramos a hacer nada: les miramos la boca y quizás les enseñemos el aspirador para que se vayan familiarizando. El segundo día, añado el espejo y un poco de aire. Vamos añadiendo cosas despacio porque nos vayan cogiendo confianza”, relata. En el caso de las personas con autismo, el proceso es todavía más lento. “Quizás el primer día no se quieren ni sentar, tienen que conocer el entorno”, añade.

En estos casos, la colaboración de la familia es fundamental, porque tienen que estar dispuestos a venir a la consulta repetidamente.

El objetivo de esta metodología es intentar realizar algún tipo de tratamiento y evitar tanto como sea posible que tengan que ir a quirófano. “Lo intentamos varias veces y, si vemos que es imposible, los remitimos a cirugía”, explica. "Hay veces, que cuando llegan a la consulta los tratamientos son tan complejos que el paso por el quirófano es inevitable. La prevención es capital porque la rueda para entrar a quirófano no se haga de cada vez más grande”, recuerda.

Intervenciones quirúrgicas

Actualmente hay una lista de espera alrededor de un año para entrar a quirófano. El 2017, el objetivo ha sido reducirla, y por estso se ha incrementado la frecuencia de intervenciones quirúrgicas, que ha pasado de dos a tres días a la semana. Desde que empezó el año, ya se han realizado 82, más que en el 2016, cuando se hicieron 75.

El año pasado acudieron a la consulta del Hospital General 145 pacientes nuevos y se efectuaron 763 segundas visitas. En el caso de los adultos, los tratamientos más frecuentes son las limpiezas y las extracciones, y en el caso de los niños, tratamientos conservadores y, si se tercia, extracciones y limpiezas.

[Fuente: Servicio de Salud de las Illes Balears. 03/10/2017]

[Foto: IB-Salut]