El Servicio de Salud Ambiental de la Dirección General de Salud Pública y Participación ha realizado desde el inicio de la temporada más de 900 controles de calidad de las aguas de las playas de Baleares.
Este Servicio semanalmente actualiza los datos en el Portal Salut (portalsalut.caib.es), donde los ciudadanos pueden consultar la calidad de las aguas de baño a través de un mapa interactivo. Como resultado de los controles, sólo se ha cerrado temporalmente una playa y se ha desaconsejado el baño en otra.
Conforme al programa de vigilancia y control de las aguas de baño de Baleares, impulsado por la Consejería de Salud, en la temporada 2017, que va del 8 de mayo al 8 de octubre, hay 157 zonas de baño censadas, con 193 puntos de muestreo, que corresponden a 32 municipios. En cada punto de muestreo, el Servicio de Salud Ambiental realizará entre mayo y octubre un mínimo de 8 controles (en total, entre 70 y 90 muestras semanales). Cabe decir que después son los ayuntamientos los responsables de poner carteles en las inmediaciones de las playas para informar a la población de los resultados de las analíticas.
Esta información se traslada semanalmente a la página web sobre calidad de las aguas de mar. A través de un mapa interactivo, los usuarios pueden acceder a una ficha de cada una de las playas en la que se incluyen el nombre de la playa, código del punto de muestreo, coordenadas, municipio al que pertenece dicho punto, fecha de la última muestra y resultado de la misma con un código de colores: verde, apta para el baño; amarillo, desaconsejado temporalmente el baño, y rojo, prohibido temporalmente el baño.
Las inspecciones de las playas incluyen:
- La toma de muestras del agua de baño para analizar en el laboratorio: Escherichia coli y Enterococos intestinales.
- Una inspección visual del agua de baño, donde se observa la transparencia, medusas, residuos alquitranados, cristal, plásticos, caucho, maderas, materias flotantes, sustancias tensioactivas y restos orgánicos.
- Una inspección visual de la arena para detectar la presencia de restos alquitranados, cristal, plásticos, caucho, maderas y restos orgánicos.
- La observación de las condiciones meteorológicas: tiempo, viento, estado de la mar y lluvias.
En cuanto al agua, cuando se superan los valores establecidos para que sea apta para el baño, se realizan muestreos complementarios para confirmar o descartar el incumplimiento de las condiciones aptas y, en su caso, se informa al ayuntamiento correspondiente y la Consejería de Territorio, Energía y Movilidad con el fin de que se pueda determinar la causa que provoca la contaminación y llevar a cabo las medidas correctoras precisas para proteger la salud de los usuarios.
Hasta ahora, esta temporada se han realizado 911 controles (512 en Mallorca, 155 en Menorca, 215 en Ibiza y 35 en Formentera), que han dado como resultado 895 playas aptas. Los 16 controles restantes detectaron contaminación microbiana y por eso se cogió una muestra complementaria para confirmar o descartar la contaminación. Sólo dos dieron resultado positivo y se dictó una prohibición de baño temporal (Albercutx, Port de Pollença) y se desaconsejó el baño temporalmente (en Cala en Forcat, Ciutadella). No obstante, en los análisis de seguimiento que se realizaron poco después los resultados ya fueron correctos.
Los motivos más frecuentes por los que las aguas de baño presentan contaminación microbiana son episodios de lluvias o vertidos desde tierra o mar.
Para más información, podéis consultar portalsalut.caib.es, donde encontraréis información sobre los puntos donde el Servicio de Salud Ambiental realizará los controles y la semana durante la que tendrán lugar.
[Fotos: Infosalut - Servicio de Salud Ambiental]