Este nuevo Plan Estratégico está totalmente alineado con los objetivos de ONUSIDA 95-95-95 para el año 2030, fecha en la que los estados miembros de Naciones Unidas se han comprometido a erradicar el Sida.
Estos objetivos se concretan en un 95% de las personas con VIH diagnosticadas, de las que el 95% estén en tratamiento y al menos el 95% con carga viral indetectable. A ellos se una el compromiso de implementar medidas para garantizar una buena calidad de vida y eliminar la discriminación. Y como objetivo fundamental, se persigue alcanzar la “cero transmisión”.
El Plan Estratégico de Prevención y Control de la infección por el VIH y otras infecciones de transmisión sexual 2021-2030 cuenta, además, con objetivos intermedios: se marca la meta, para el año 2025, de reducir un 90% el porcentaje de nuevas infecciones con respecto a los indicadores que estaban vigentes hace una década.
Entre las acciones que se establecerán para lograr la eliminación del VIH en 2030, destacan la importancia de activar los mecanismos necesarios para disminuir la fracción no diagnosticada. Para ello, es necesario impulsar el diagnóstico precoz en todos los niveles de atención; priorizando la calidad de vida; implementado medidas para el abordaje de la multi-morbilidad y la discriminación, y garantizar el acceso universal a la atención sanitaria en las personas con el VIH.
[Fuente: Ministerio de Sanidad. 26/02/2021]
[Foto: Infosalut / Gent jove passejant / CC BY-NC-SA 4.0]